La terapia me ayudo a aceptar la pérdida de mamá y entender que hay cosas que no están en mis manos y estar tranquilo con eso. Además, mejoró la relación con mi padre y hermano, ahora soy asertiva en cómo me comunico con ellos y me prioritizo. También, me ayudo a aclarar dudas personales y a ser más amable conmigo